· Las mujeres utilizan mayor parte del cerebro cuando piensan, ya que para elaborar una reacción usan los dos hemisferios.
· Los hombres, en cuanto a la resolución de problemas, se centran en la meta y las mujeres en el proceso (ya que son más analíticas y lo miran todo detalladamente. Esto se debe a que ellas son más comparativas y almacenan más información de menos importancia aunque sea a corto plazo y ellos solo lo hacen cuando ésta tiene una importancia especial). Ellos prefieren llegar rápidamente a la solución, ya que buscan resultados inmediatos y la causa de las cosas.
· La cantidad de serotonina (sustancia química o neurotransmisor implicado en la sensación de bienestar y felicidad) se procesa de manera distinta en los dos sexos. En situación de estrés, en las mujeres influye creándoles depresión y en los hombres hace que sean más propensos a sufrir autismo, dislexia, trastorno por déficit de atención y esquizofrenia, pero también a un incremento de la agresividad.
· Diferente manera de procesar la información: El hecho de que cada sexo interprete o perciba de modo diferente una misma situación se debe a la cantidad de neurotransmisores que abundan en la mujer, que le aportan cualidades imaginativas, empáticas o habilidades sociales por ejemplo.
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